Hygge

En blackmoby hablamos mucho del Hygge.

Hygge es un concepto difícil de acotar, ya que puede significar infinitas cosas para distintas personas, pero los daneses, los expertos mundiales en felicidad y quienes lo inventaron, han intentado explicarle al mundo este concepto.

Partamos por la definición:

¿Qué es hygge?

De todas las definiciones que hemos encontrado, la que más nos gusta y satisface es la siguiente:

Hygge es el arte de crear intimidad.

Pero ¿qué significa eso? Lo esencial para el Hygge es que hay que saber disfrutar las cosas simples. Eso suena MUY repetido, ¿no? Estamos de acuerdo, es algo que escuchamos siempre y, aunque sabemos que es en el fondo cierto, es un mensaje que termina despareciendo por no aferrarse a nada concreto. Es tantas cosas a la vez, que finalmente no es nada.

Pero por suerte el Hygge no es solamente una teoría, sino por el contrario: exige que todo lo que sugiere sea puesto en práctica, y es la práctica diaria del Hygge lo que trae consigo los momentos íntimos y felices. 

El Hygge nos enseña una manera de disfrutar las cosas simples que no tiene nada de misterioso, y que es a su vez muy simple también: se trata de

a) identificar las cosas que hacemos a diario, y luego

b) dedicarles tiempo, atención y cariño.

El Hygge se ha concentrado principalmente en actividades indoor. En Dinamarca los días son cortos y las noches largas. El frío es habitual y es frío en serio. Estas condiciones a priori negativas bien podrían ser sinónimo de infelicidad, o al menos de incomodidad. Pero terminaron siendo lo contrario. Empujaron a los daneses a encontrar la felicidad adentro, en el goce de lo que es simple y transcurre lentamente. 

Una de las gracias de esto es que, independiente del clima, podemos replicarlo en nuestras casas, y que efectivamente las cosas que solemos hacer puertas adentro están caracterizadas por la sencillez.

Un ejemplo: tomar un té.

Hay una gran diferencia entre tomar una taza de té verde en bolsa, que se sirve en una taza que nos es indiferente, quemando el té con un agua recién hervida en el hervidor eléctrico (que probablemente esté cada vez con más sarro), mientras hacemos scroll infinito en instagram, comparado con hacer esto mismo con un té en hojas, con una tetera y una taza que nos encantan, dedicándole toda nuestra atención al proceso de calentar el agua a la temperatura adecuada, y luego tomar ese té, disfrutando lentamente su sabor y el calor que nos aporta, mientras escuchamos de fondo música que nos encanta y que seleccionamos específicamente para este momento. Tomar ese té deja de ser un trámite, y pasa a ser un ritual que nos da paz. Es una actividad Hygge.

¿Vamos a perder mucho tiempo al hacerlo? ¿Vamos a ser menos productivos? ¿Vamos a perdernos de algo importante en las redes sociales?

Probablemente no. Probablemente nos tome 10 o 15 minutos en vez de 2. Pero son 10 o 15 minutos felices, de paz, en vez de 2 minutos indiferentes, privados de placer y felicidad, y probablemente dominados por la ansiedad.

Así como con el té, las instancias son infinitas. El Hygge pone en práctica, sin pretensiones, una filosofía que oriente históricamente ha identificado como la condición fundamental de la felicidad: el saber vivir en el momento presente. El Hygge lo logra a través de la creación y el cultivo sostenido de rituales cotidianos.

Todo puede ser un ritual: determinar la luz del entorno, la temperatura, la ropa que usamos, los espacios especiales, la música que elegimos, la atención y placer que obtenemos de lo que comemos, el goce de la compañía propia y de los que queremos. Hygge es darle importancia a sentirse bien, a sentir calidez y comodidad. Es nada más que una cuestión de actitud. Y todo eso es finalmente lo que crea intimidad. Con el Hygge, no damos el bienestar por sentado, sino que lo cultivamos cada vez que estamos en nuestro lugar de descanso, en nuestra casa.

En blackmoby queremos aportar con la creación de esos espacios íntimos con varios elementos, y la ropa que usamos en casa es solamente el primero de ellos.

Este blog (en inglés), es probablemente el mejor recurso online de información respecto al hygge. 

Este libro de Meik Winning, del Instituto Danés para la felicidad (sí, existe eso), es una maravilla. Es bonito, explica cada detalle y da muchos tips prácticos respecto a cómo incorporar hygge a nuestras vidas. Tiene capítulos sobre la luz, la comida, la ropa. Todo, es la biblia del Hygge.

Si los daneses, con sus días fríos y oscuros fueron capaces de incorporar estos rituales, ¿por qué nosotros no podríamos?